Fundación Telefónica en alianza con la Fundación Venezolana Pro-cura de la Parálisis (Fundaprocura) realizó recientemente en la sede principal de Telefónica en Caracas, su entrega número 100 de sillas de ruedas, como parte del programa “Nuevas esperanzas ruedan por Venezuela”, que desde el año 1999 ha beneficiado a 3.500 personas con movilidad reducida en 22 ciudades del país.
Con el apoyo de los Voluntarios Telefónica, en esta oportunidad se entregaron 37 sillas de ruedas adaptadas especialmente a las necesidades de los niños, niñas, jóvenes y adultos que las recibieron, en un acto al que asistieron: Valentina Ríos, Gerente General de Fundación Telefónica; Inés Sandra Machado, Directora de Relaciones Institucionales de Telefónica; Maribel Meneses, Vicepresidenta de Recursos Humanos de Telefónica; Cecilia Vega de Puppio y Federica Riveroll, Presidenta y Directora General de Fundaprocura, respectivamente, entre otros representantes de las dos instituciones.
“Ustedes son un ejemplo de superación para todos nosotros. Todas las sociedades del mundo necesitan hombres y mujeres como ustedes, capaces de gestionar los cambios constantemente. Así que nos sentimos muy orgullosos y complacidos de este aporte que hacemos para ponerle ruedas a la esperanza”, afirmó Inés Sandra Machado.
Por su parte, Valentina Ríos entregó un reconocimiento a la Fundación Venezolana Procura de la Parálisis y destacó el trabajo en equipo realizado entre la Fundación Telefónica y esa organización de desarrollo social a lo largo de sus 16 años de alianza: “Fundaprocura acumula una experiencia en la asistencia diaria a personas con movilidad reducida. Nos transmite su compromiso y la comprensión de las necesidades de su comunidad. Los distinguimos por la nobleza de su misión, la entrega y proactividad de todos sus miembros”.
Más esperanzas ruedan por Venezuela
Para Lisbeth Argueta, madre de Christopher Gómez, un niño de 4 años de edad que nació con Espina Bífida, este aporte ha significado que su hijo pueda tener una mejor calidad de vida: “Christopher necesitaba una silla de ruedas para movilizarse mejor y para ser más independiente. Estoy muy agradecida. Desde el momento en el que fuimos a ver la silla, mi hijo estaba muy feliz. Ahora podrá desplazarse solo e ir a donde quiera”.